Las palabras de aliento de mamás y papás son como interruptores de luz. Pronunciar una palabra alentadora en el momento adecuado en la vida de un niño es como iluminar toda una habitación llena de posibilidades.
-Gary Smalley
Esta semana me vino a la mente esto, cuál es el mensaje que estoy enviando y que mi hija está recibiendo de mí. Creo que, ya sea si tienes un hijo o muchos, sea tuyo u otros a los que cuides, esto es crucial, y mucho más si estamos en un sendero de luz usando la ciencia de la Palabra Hablada conscientemente.
¿Con qué frecuencia algunas palabras descuidadas, estresadas o poco meditadas que decimos dejan a nuestros hijos con mensajes menos que ideales?
Demasiadas veces, en mi caso lo confieso, y aunque fuera sólo una vez, ya sería demasiado realmente si somos conscientes. Cuando nuestros niños son pequeños es relativamente más sencillo que nos salgan naturalmente palabras amorosas y de aprecio, ¡están tan llenos de potencial! , ¡nos ven con ojos tan luminosos!. Pero, si como yo tienes una adolescente, quizás te preguntes qué hago cuando ya no quieren escuchar esas palabras y muchas veces lo que recibimos de ellos es directamente poco amoroso?
Bueno, como dice el dicho: “La lengua no tiene huesos, pero es lo suficientemente fuerte como para romper un corazón. Así que ten cuidado con tus palabras». El autor, Napoleón Hill, a su vez dijo: “Piénsalo dos veces antes de hablar, porque tus palabras e influencia plantarán la semilla del éxito o del fracaso en la mente de otra persona”. Definitivamente importante controlar nuestras palabras, pero cómo decirlas cuando pareciera que no nos escuchan, como en la adolescencia?
[i] El maestro espiritual Omraam Mikhaël Aïvanhov nos da una clave acerca del alcance de las palabras de una Madre. “Influya en su hijo hablándole mientras duerme. Aunque no oiga ni entienda, hay ciertas leyes del universo que harán que las semillas que plantes en él germinen y den fruto cuando crezca. Puedes hablarle de las leyes morales y de todo lo que es bueno y verdadero y puedes estar seguro de que todo lo que digas quedará grabado dentro de él.”[ii] ¡Qué reconfortante saberlo!
Y esto, es la clave, ¿verdad? Sabemos que el Reconocimiento es es uno de los Pilares para una personalidad sana y lo nutrimos con palabras positivas. Incluso si pareciera que ya no nos escuchan, las buenas palabras, y la energía beneficiosa con las que las calificamos, quedan grabadas en el consciente o en el inconsciente de nuestros hijos. Las palabras bondadosas, comprensivas construyen uno de los 4 pilares principales de la autoestima y una personalidad sana, o sea, equivalen a cosas buenas que sucederán a nuestros niños. Ya sea que tu hijo sea mayor o menor, los buenos mensajes continuarán nutriendo y beneficiando sus vidas.
Y hay un sinfín de cosas lindas y dulces que podemos decirles ---¡podemos ponernos el reto de confeccionar hermosas palabras como un arreglo floral para regalar a nuestro/s hijo/s!—, y para inspirarles a ello me gustaría compartirles una enseñanza de una Maestra Ascendida muy especial, la Chohan del Sexto Rayo.. En septiembre del 2015 la Maestra Nada habló acerca de una paternidad o crianza espiritual. Este discurso incluye sugerencias de ciertas cosas que podríamos decirles a nuestros hijos. Es un recordatorio tan maravilloso que lo incluyo aquí esperando les sea muy útil:
“Un padre/madre puede, a lo largo de toda la experiencia del viaje de un niño en la vida, expresarle una y otra vez: “Te amo y Dios está dentro de ti. Eres un hijo de Dios. Fuiste creado a imagen y semejanza de Dios. Dios dentro de ti es luz, amor.” El simple hecho de decir estas palabras permitirá que esta enseñanza se arraigue en su alma para que nunca la olviden, ya sea que susurres las palabras, las compartas en momentos íntimos, las expongas durante las comidas o las intercales en tus comunicaciones cuando te conectas con sus hijos mientras trabajan y juegan juntos, y mientras viajan y hacen otras cosas juntos. Se convierte en parte de su realidad y lo saben con certeza. Simplemente saben, aceptan y creen que Dios está donde están porque fueron creados a imagen y semejanza de Dios.[iii]
Estoy agradecida por esta enseñanza porque es realmente valioso el recordatorio y también me encanta la idea de que lo que decimos durante el tiempo suficiente y con la suficiente frecuencia, con amor, realmente se graba en el inconsciente. Deseo bendecir a mi hija para siempre y dejarle un impacto duradero para siempre. Sé que tú también. Ahora, conocemos --o quizás recordamos-una manera de hacer esto. ¡Gracias Maestra Nada!
Comparte en los comentarios lo que dices a tus niños que sientes les ha beneficiado más, o quizás lo que sientes que deberías decirles a partir de ahora. ¡Sólo deja que la inspiración fluya!
Gracias por Ser y Estar
Mariela, basado en el blog de Spiritual Parenting de Serena Gaefke